El proyecto de Ley de Urgencia Económica aprobado por la Asamblea Nacional deja algunos interrogantes. “En esta caso el problema surge porque durante los últimos años se ha advertido de un desenlace cataclísmico a la política de aumentar el endeudamiento público, por encima del techo que ordena la Ley y la capacidad de endeudamiento de la República”, comentó Alfredo Pinoargote. "Salta a la vista entonces, que, aunque se trata una apuesta de gobierno cuyos resultados están por verse, algo no calza con las expectativas ciudadanas y la coreografía cataclísmica que trompeteaba un cambio de modelo. En todo caso, aún queda el veto parcial (a la Ley Orgánica de Fomento Productivo, Atracción de Inversiones, Generación de Empleo y Estabilidad y Equilibrio Fiscal)", señaló Pinoargote