Ha sido contagioso el fraudulento secretismo impuesto por el exministro de Finanzas (y casi exsuperintendente de cooperativas), señor Rivera, respecto de los contratos de deuda pública, con el que se quiso pasar de listo tratando de ocultar la violación de los límites impuestos por leyes del propio correísmo. El superintendente de Bancos, su recomendado, le ha seguido los pasos. Nada menos que para tapar la situación del IESS. (...) Curioso, en el rosario de normas legales que citó para basar su decisión, no hay una sola referida al IESS; todas tienen que ver con el sistema financiero. Peor, una de esas normas (Código Monetario, art. 353), a la que vivamente copió solo en parte, expresamente dice todo lo contrario de lo hecho por el superintendente: “No se aplicará el sigilo ni reserva a los recursos de las entidades del sector público”. El pasado 6 de marzo el asambleísta Patricio Donoso presentó un proyecto de reforma legal, para corregir este asuntito. No es necesario, pues no hay ley que lo permita. Basta destituir al superintendente.