Solo las Fuerzas Armadas, Policía e Iglesia se salvan de la decepción ciudadana en una encuesta. En Quito son más escépticos con los líderes que en Guayaquil. (...) La Asamblea Nacional, hasta ahora impoluta en comparación con las irregularidades encontradas en el Gobierno anterior y en entes públicos, se enfrenta mañana a su borrón y cuenta nueva, tras el cruce de acusaciones entre su expresidente José Serrano y el fiscal general Carlos Baca Mancheno. Es la institución del Estado que más ha decepcionado a sus mandantes y representados. “Indudablemente las Fuerzas Armadas y la Policía merecen toda consideración, pues constituyen una excepción a la debacle en que se desenvuelve el país. Por desventura, las instituciones públicas funcionaron en los últimos años en razón de lo que se indicaba desde el palacio de Gobierno. Quienes ocupaban los puestos de dirección fueron corderitos irresponsables, despreciando su personalidad, la ley y su juramento de actuar de conformidad con las normas”, sentencia Jacinto Velázquez, analista guayaquileño y excandidato presidencial.