La deuda pública del Ecuador está cayendo desde hace tres meses, sin embargo eso ocurre porque ya nadie quiere prestar dinero al país. Entre el 2010 y 2015 la deuda se ha triplicado. En mayo de este año la deuda ha tenido un ‘frenazo en su crecimiento, ocasionado porque prestamistas internacionales están reticentes a proporcionar dinero “no porque el Ecuador tenga una enorme deuda, sino porque tenemos un mal historial crediticio.”