El director general de Cordes, José Hidalgo, mencionó que el primer efecto de la baja en los precios del petróleo será una caída de la actividad económica, y esto se debe a que la economía ecuatoriana, en los últimos años, se ha vuelto cada vez más dependiente del gasto público, hasta el año pasado ese gasto representaba el 44 % del producto interno bruto (PIB). Hidalgo también dio cuenta sobre algunos cambios en la metodología en algunos conceptos en el boletín del Ministerio de Finanzas. Así en los meses previos el Boletín de Deuda Pública Consolidada que era la suma del saldo total de la deuda interna y externa, en el boletín de julio se introduce una "novedad", se crea un nuevo concepto el de deuda agregada que reemplaza a lo que antes se conocía como deuda consolidada. Ahora, el Gobierno llama deuda agregada a la suma del saldo total de la deuda interna y externa, mientras que deuda consolidada es aquella que toma en cuenta la totalidad de la deuda externa, y la deuda interna contraída con acreedores privados del Régimen, aquí no se toma en cuenta cerca de 11 000 millones de dólares que el Gobierno tiene como deuda con organismos públicos, principalmente con el Iess. La consecuencia de esto es que la relación deuda/PIB disminuye, cae al 21 %, por lo tanto el Gobierno tendría un margen mucho mayor para aumentar el endeudamiento, y ya no tendría el 32 % (deuda/PIB). El tope que marca la ley es del 40 %. (Ecuador en Vivo)